Todos los días escuchamos innumerables noticias sobre la forma en que la delincuencia va avanzando a nivel nacional e internacional. Nos aterrorizamos con reseñas sobre secuestros a hombres de negocios, robos con violencia a empresarios, robo en casas habitación aún y cuando la familia se encontraba dentro del domicilio, etc.

Bajo este escenario es normal que muchos empresarios hayan decidido el proteger su vida y la de sus seres queridos mediante el uso de un servicio profesional de escoltas, más razonable aún el que muchos otros lo estén pensando de forma seria en este momento.

Posiblemente el primer tema con el que se tope quien decida protegerse mediante un servicio de escoltas es el decidir si este deberá ser a través de un servicio externo haciendo uso de una empresa especializada en este tema o a través de recursos propios. La realidad es que ambos sistemas tienen ventajas y desventajas.

Mientras que el uso de personal propio para protección personal tiene como principales ventajas la baja rotación del personal y una mayor lealtad de parte de los mismos hacia el funcionario y su familia, el contar con un proveedor especializado nos reduce los riesgos laborales y facilita los temas legales relacionados a la portación de armas de fuego.

El uso de personal interno involucra el hacer propio un proceso de selección de personal que debe incluir la definición exacta de las descripciones de puestos, la selección de candidatos y la aplicación de pruebas de confianza incluyendo el polígrafo, así como los estudios médicos, socioeconómicos y psicométricos.

El contar con personal propio involucra también el desarrollar y llevar a la práctica un programa completo de entrenamiento adecuado a las necesidades específicas de cada puesto desempeñado. Este programa debe estar sustentado en procedimientos claros de acción tanto en situaciones normales como de crisis, y preferentemente deberá incluir la participación de los propios protegidos para que estos puedan reaccionar favorablemente cuando un evento adverso se presente.

El contratar personal de forma interna involucra también el cumplimiento de todas las obligaciones patronales como pueden ser la contabilización y el pago puntual de nóminas, el pago del Seguro Social, Infonavit, la programación de vacaciones, atención de incapacidades del personal, entre muchas otras.

Temas relacionados con la contratación de personal interno incluyen también aspectos tan esenciales como el decidir qué tipo de unidades se utilizarán para el traslado del funcionario y su personal de seguridad y la programación del mantenimiento de las mismas, la compra de equipo y uniformes para el personal, la provisión de alimentos durante su estancia en la ciudad y de todo el tema logístico en cada viaje.

Si la decisión que se toma es la de recurrir a un proveedor externo para atender las necesidades de seguridad de los ejecutivos de la empresa el trabajo es básicamente el mismo, se debe asegurar el cumplimiento cabal de todos los factores mencionados que involucran el contar con personal interno, con dos diferencias importantes: El proceso estará en manos de un tercero por lo cual no necesariamente se tendrá un control de todas las variables por más detallado que sea el contrato de trabajo, y el desarrollo del servicio de seguridad tendrá un costo adicional de entre un 40% y un 90% que involucra no solo el cumplimiento de las obligaciones laborales por parte del proveedor sino como su margen de ganancia que en este tipo de servicios suele ser bastante oneroso.

Aunque existen ventajas claras al contratar a un proveedor cuando este está realmente especializado en los servicios de protección ejecutiva, se deben tomar medidas de control adicionales que incluyen el complementar los procesos de selección de personal con pruebas internas y el apoyar en el entrenamiento del personal.

Un tema crítico al tratar con un proveedor externo es el desarrollo y firma de un contrato de servicio lo más detallado posible. Este documento debe incluir cláusulas específicas para atención y supervisión del servicio, uso y disposición de recursos de la empresa, atención de diferentes tipos de eventos, responsabilidad por fallas en protocolos, sanciones, entre otros.

Es decir, el contar con un servicio de seguridad ejecutiva interno que funcione de forma profesional no es fácil, pero tampoco lo es el asegurar que un servicio externo cumpla con todas expectativas y obligaciones contractuales.

Entonces, ¿Cuál es el factor de éxito del sistema?

Independientemente de si se decide que el personal custodia sea interno, externo o una combinación de estos, posiblemente el verdadero factor de éxito del proceso sea el contar con un Director o Gerente de Seguridad leal, con experiencia y sobre todo competente que se encargue de evaluar las necesidades de seguridad de los ejecutivos de la organización y de llevar a la práctica las acciones necesarias para solventar estas vulnerabilidades. Este valioso elemento deberá ser en todos los casos personal interno.

Para que este encargado pueda cumplir con su función, varios factores de éxito deben conjugarse:

1. El perfil del propio individuo, el cual deberá contar con habilidades no solo administrativas sino con herramientas prácticas y operativas que le permitan involucrarse directamente en la operación.

2. La libertad que se le dé a este administrador para actuar ya que regularmente la expectativa de servicio por parte de los ejecutivos dista mucho de las necesidades reales del servicio.

3. La disposición de recursos, ya que estos permitirán que alcance los objetivos establecidos.