Entrenando a los Reclutadores para Detectar la Mentira

Como ya se ha comentado en otros artículos las medidas de control para prevenir el robo en una empresa deben incluir aspectos Físicos (Muros, iluminación, etc.), Administrativos (Políticas, procedimientos, etc.), Tecnológicos (CCTV, Alarmas, etc.), Legales (Fianzas, Contratos, etc.) y por su puesto los del tipo Humano Operativo (Procesos de Contratación, Entrenamiento, etc.)

Los Controles Humano / Operativos incluyen varios aspectos, pero una de los más importantes es el de la contratación. La regla a aplicar en este caso es: “No quiere ladrones en su empresa… Simple, no los contrate”.

La mejora importante que puede hacer una empresa en materia de Reclutamiento y Selección de su personal es el mejorar los filtros que se aplican a los candidatos antes de ser contratados. Estos controles pueden llegar a incluir entrevistas dirigidas, exámenes médicos, exámenes toxicológicos, estudios socioeconómicos, estudios psicométricos, pruebas poligráficas, entre muchos otros. Pero el primer paso para detectar si un candidato está mintiendo es siempre la Entrevista Dirigida realizada por el personal de Recursos Humanos de la Empresa.

La Entrevista Dirigida es siempre el primer contacto con un candidato y tiene como objetivos la revisión de su información curricular y la obtención de información clave para decidir si es viable continuar con los procesos de selección o en su caso si se le tendrá que informar al candidato que el proceso no continuará más. Detectar incongruencias y mentiras en la historia del candidato es clave para tomar esta decisión.

La mala noticia es que por más entrenado que este nuestro personal reclutador en los procesos de entrevista, si no recibe entrenamiento específico para la detección de mentiras u omisión de información durante una entrevista, terminará el proceso sin los criterios adecuados y objetivos para tomar una decisión inteligente, y que si además no contamos con ningún otro tipo de filtro como lo pudiera ser una prueba poligráfica, es muy probable que terminemos contratando un empleado deshonesto que pronto causará fuertes daños en la organización.

La buena noticia es que la detección de la mentira y del engaño es un tema que se puede aprender y llegar a dominar con el correcto entrenamiento y la práctica. Un programa de entrenamiento de este tipo deberá incluir temas teóricos, análisis de casos mediante el uso de video y ejercicios prácticos.

El contar con un buen proceso de Entrevista Dirigida tiene múltiples ventajas entre las que se incluyen: Depurar a los candidatos no solo por su nivel de habilidades, sino por su honestidad; detección de candidatos que pudieran convertirse en un riesgo al ingresar a la organización, reducción de los costos de reclutamiento al evitar realizar futuras inversiones en malos candidatos, disminuir la rotación de la empresa al asegurar el ingreso de nuevos colaboradores bien seleccionados, y finalmente la reducción significativa de robos en la empresa al asegurar que el personal contratado llega con un alto nivel de integridad.

Es importante recordar que siempre es recomendable el complementar estas pruebas con filtros adicionales.