Los Tipos de Personalidad Durante la Entrevista Dirigida

El mundo esta dividido por dos tipos básicos de personalidad: Los introvertidos y los extrovertidos. Mientras que una persona introvertida tendrá una tendencia hacia sus propios pensamientos y emociones, una persona extrovertida tendrá una tendencia a proyectar una mayor energía hacia el exterior debido a su tendencia a ser más sociable. Por definición cada individuo con un proceso de pensamiento normal posee una personalidad introvertida o extrovertida, pero nunca ambas.

Visualicemos por un momento una línea en el horizonte donde pudiéramos dividir a todas las personas en dos grupos: Introvertidos a la derecha y extrovertidos a la izquierda. Si pudiéramos observar los extremos de este horizonte podríamos ver a la punta derecha a una persona que es tan introvertida que vive aislada en una cueva con sus propios pensamientos y que evita a toda costa el contacto con otros seres humanos, y en el extremo izquierdo veríamos a un individuo que es tan extrovertido que anda desnudo por la calle saludando a todos debido a que realmente no le importa en ninguna forma lo que otros piensen de él. Aunque estos son ejemplos exagerados, permiten visualizar perfectamente los dos extremos de estas personalidades. En la práctica todos nosotros estamos en uno u otro lado de este horizonte más lejos o más cerca de estos extremos.

Pero, ¿Por qué es importante conocer el tipo de personalidad durante una Entrevista Dirigida?

Una vez que se ha iniciado el proceso de entrevista, esta deberá iniciar con el proceso de rapport discutido ya en anteriores artículos, y durante esa etapa es que el entrevistador observará el comportamiento del entrevistado para definir algo que conocemos como la “línea base” del sujeto.

La línea base del sujeto es la herramienta que le permitirá al entrevistador definir el ritmo y rumbo que tomará el resto del proceso de entrevista. Durante esta etapa el entrevistador observará básicamente cuatro cualidades del sujeto: 1. Si se trata de un individuo introvertido o extrovertido, 2. Su estado anímico, 3. Su comportamiento no verbal básico, y 4. Su paralenguaje. Temas que en futuros artículos iremos tratando.

Mientras que una personalidad introvertida dará al entrevistador la pauta para guiar la entrevista en un ritmo más pausado y prestando atención a las emociones y sentimientos de la otra persona, una personalidad extrovertida indicará al entrevistador que el ritmo de la entrevista deberá ser más rápido y haciendo hincapié en los hechos y datos tangibles.

Un individuo con una personalidad introvertida tenderá a estar continuamente preocupado por lo que otras personas piensan de él, estará más atento en consecuencia a las palabras que utiliza durante la entrevista debido a que le preocupa lo que el propio entrevistador opine de él. Será más reservado con el entrevistador debido a que desconfía de forma natural de los extraños, y como disfruta el detalle en las cosas será muy cuidadoso en escuchar las palabras que utiliza el entrevistador, así como el lenguaje no verbal que este emite.

Un individuo con una personalidad extrovertida tenderá a hablar más durante el proceso de entrevista e incluso tratará de guiarla, buscará ser el centro de atención del proceso por lo que divagará en historias personales si el entrevistador se lo permite. Como su personalidad es orientada a la acción, si el proceso de entrevista pierde novedad por ser muy lento o porque las preguntas del entrevistador no son las adecuadas, perderá atención e interés en el mismo lo que dificultará considerablemente el obtener información de calidad.

Aunque en el ejemplo mencionado anteriormente pudimos separar a todos los individuos fácilmente en dos grupos, en la práctica el proceso no es así de simple, tres factores influyen en este proceso:

1. El entrevistado está en una posición incómoda y en un estado de continua alerta, por lo que es muy importante hacer con él un buen proceso de rapport;

2. Existen varios tipos de personalidad introvertida y varios tipos de personalidad extrovertida, algunos de ellos muy similares entre sí; y

3. Las propias habilidades y limitantes del entrevistador, las cuales como ya hemos mencionado se pueden mejorar considerablemente con entrenamiento y práctica.

Para fines prácticos una forma muy simple para determinar la personalidad de un individuo es la observación directa de sus movimientos. Si observamos a nuestro interlocutor de frente y este de forma sutil y continua nos presenta su lado derecho del rostro y de su cuerpo, entonces su personalidad será sin lugar a dudas introvertida, si en cambio nos presenta continuamente su lado izquierdo su personalidad será extrovertida.


Por más simple que parezca esta herramienta es altamente efectiva y facilita considerablemente a los entrevistadores profesionales el identificar la personalidad de sus entrevistados. Usando de la forma correcta este conocimiento el entrevistador asegura a su favor un paso muy importante en el proceso de Entrevista Dirigida.

Ser introvertido o extrovertido no es una preferencia personal sino una característica innata del individuo y el contar con una u otra característica no es ventajoso ni limitante de forma alguna para ninguna persona, prueba de esto es que si somos observadores podemos ver a personas introvertidas desenvolviéndose en eventos públicos como cantantes o políticos y a personas extrovertidas en tareas más discretas como escritores o investigadores de laboratorio; pero para el entrevistador esto si representa una valiosa herramienta para marcar tanto el ritmo de la entrevista como la forma en que deberá dirigirse a su interlocutor.

A través del programa de entrenamiento “La Entrevista Dirigida para la Selección del Capital Humano” Control Total de Robos brinda a los reclutadores y entrevistadores profesionales poderosas herramientas no solo para determinar la personalidad de los nuevos candidatos, sino para determinar si están mintiendo u omitiendo información valiosa durante su proceso de entrevista.