Los signos paralingüísticos son un conjunto de signos no verbales que acompañan la comunicación lingüística (la palabra) y que expresan la comunicación emocional del mensaje. Estos signos pueden ser emitidos de forma consciente o inconsciente por el sujeto y aunque pueden ser característicos y únicos de un idioma o zona geográfica en particular, la gran mayoría de ellos son universales y sirven para sugerir interpretaciones particulares de la información que está siendo emitida.

Está comprobado que en gran medida la comprensión del mensaje está directamente influenciada por el uso y la interpretación de los elementos paralingüísticos. Así, por ejemplo, la poca fluidez al hablar suele denotar nerviosismo o poco conocimiento sobre un tema en particular.

Como ya se ha mencionado en anteriores artículos, el proceso de Entrevista Dirigida consiste en una serie de pasos específicos diseñados para saber si la persona entrevistada miente u omite información. La propia entrevista inicia con una etapa de rapport donde el entrevistador se encargará de observar la “línea base” del sujeto entrevistado incluyendo aspectos tales como la observación del estado anímico del sujeto, si es que este es introvertido o extrovertido y la observación del canal paralingüístico.

Durante la entrevista y específicamente al tratar temas críticos como pueden ser el consumo de drogas, la obtención de beneficios ilícitos o la participación directa en un hecho delictivo, la observación del canal paralingüístico tomará especial relevancia para interpretar correctamente las respuestas del entrevistado, ya que al ser comparado con la línea base del sujeto, permitirá al entrevistador “leer entre líneas” los mensajes que están siendo emitidos por su contraparte.

Para fines prácticos existen cuatro variables que pueden y deben ser observadas durante un proceso de Entrevista Dirigida:

1. La Latencia de Respuesta. Esto es el intervalo de tiempo que existe entre la última palabra del entrevistador y la primera palabra de respuesta emitida por el entrevistado.

Regularmente una mayor latencia de respuesta indicará que el sujeto está analizando su respuesta para que esta coincida con lo que cree que su interlocutor desea escuchar, o en su defecto para que coincida con la historia y/o argumentos que ha presentado hasta el momento.

2. Los cambios en el volumen de la voz. La mayor parte de las veces cambios hacia arriba (más volumen) indicarán que el sujeto está sufriendo un mayor estrés y que está incomodo o molesto con la pregunta, cambios hacia abajo (menos volumen) indicarán que el sujeto está tratando un tema que le resulta muy personal y para compartirlo requerirá de establecer un fuerte lazo emocional con el entrevistador.

3. Los cambios en la velocidad de la palabra, es decir cambios en el número de palabras emitidas por minuto por parte del entrevistado. Regularmente cuando el sujeto miente u omite información este tenderá a bajar la velocidad de su voz para acentuar y reforzar su idea, en cambio, cuando la voz se acelera es posible que el sujeto este molesto o en su defecto tenga ya preparado un discurso para dar una explicación sobre el tema a tratar.

4. Los cambios en el tono de la voz. Voces más graves indicarán cambios en el estado anímico y tonos agudos suelen indicar nerviosismo u omisión de información en la idea expresada.

Aunque no es el único indicador de mentira u omisión de información durante un proceso de Entrevista Dirigida, el canal paralingüístico es una muy valiosa herramienta que permite al entrevistador interpretar con bastante certeza los mensajes que están siendo emitidos por parte del entrevistado.

El uso de esta y de otras valiosas herramientas es analizado a detalle durante el programa de entrenamiento “Entrevista Dirigida para la Selección del Capital Humano”, herramienta que tan solo durante este año ha sido aprovechada ya por más de 16 empresas a nivel nacional.